Acuario – únicos en su imperfección
Hoy traemos a tu conocimiento todos los detalles de cómo es una persona del signo Acuario para que descubras los encantos del esquivo aguador del zodiaco y sepas cómo manejarte cuando quieras conquistarlo. Sencillo pero con sus vericuetos, el nativo de febrero tiene muchas sorpresas para ti. Descubre qué significa la libertad y el amor para ellos y conmuévete con su lado humanitario. No dejes de conocer a Acuario un emblema de la liberación del espíritu y del altruismo.
Más allá del bien y del mal – son ellos mismos
Su inteligencia les permite transgredir las reglas sin que ello los haga hacer el ridículo. Usan la lógica más de lo que parece y son dueños de un sentido del humor que les permite estar siempre de buen humor, pero sin caer en banalidades.
Son profundos y sus sentimientos son más hondos de lo que te dejan ver. Disfrazan su tristeza bajo un halo de altanería y defienden la verdad casi tanto como la vida. La libertad es su carta de presentación, por lo que no se atan a nada ni a nadie.
Acuario en el amor – te aman, pero no lo confesarán
En el amor van hasta las últimas consecuencias, pero nunca te enterarás cuando te han entregado su corazón, ya que el romanticismo no forma parte de su vida. En el sexo pueden llegar a convertirse en insaciables si es que la atracción física los supera.
A la hora de conquistar, hacen gala de su ingenio, de su sex-appeal y de sus conocimientos, lo cuales suelen dejar de boca abierta a sus enamorados y enamoradas de todo el zodiaco.
Cuando sienten que se han enamorado, es como si hubiera ocurrido una revolución química dentro de su cuerpo y buscan explicarla a través de la razón. Estar enamorados no es su estado ideal, o al menos no el que ellos buscan. Por esa razón es que muchas veces se los ve involucrados en relaciones clandestinas, ya que ese es para ellos su terreno más seguro, puesto que podrán escapar cuando les plazca hacerlo.
Ideales idealistas – nunca se rinden al defender lo que piensan
Las personas que han nacido en febrero llevan en su frente la bandera de los ideales que defienden. Su falta de límites en la vida cotidiana, también los lleva a tener ideales que no se ajustan a la realidad que les ha tocado vivir. Por ello es que los mismos tienden a caer en la utopía. Lo buen que tienen es que no se rinden y siempre tratan de abogar por aquello que buscan defender.
Imprevisibles y reactivos – problemáticos en la convivencia
No es fácil convivir con un nativo de este signo. Ellos no siguen las reglas de nadie e intentan imponerse sin dejar que el otro opine. Son demasiado territoriales y no permiten que los demás tomen participación en ciertas decisiones.
Pueden llegar a ser tan imprevisibles, que muchas veces hacen sentir a quien comparte una cotidianidad con ellos, que no saben con quien están viviendo.